30 septiembre, 2010

Lwów, un otoño

Entrada del Ejército Rojo en Lwów el 22 de septiembre de 1939

Hace un año, hacia el 22 de septiembre recordábamos la extraña parada militar conjunta de los ejércitos nazi y soviético que tuvo lugar setenta años atrás, en 1939, en la ciudad polaca de Brześć, entonces recién ocupada. Hoy, con ocasión de este aniversario, publicamos algunas muestras de cómo vivió la gente de Lwów la ocupación de Galizia por aquellos mismos días.

«Trofeos» obtenidos por el Ejército Rojo en Ucrania Occidental

Lwów, sede del voivodato más oriental de Polonia, ya a principios de los años 30 se recuperó de la Gran Depresión, y los éxitos de la ciudad se proclamaron en todo el país desde las radios y la prensa. La industria local de construcción, que empleaba a más de quince mil personas, experimentó un especial boom: en los años inmediatamente anteriores al pacto Molotov-Ribbentrop se levantaron 974 bloques de apartamentos, 965 casas familiares, cuatro iglesias, ocho escuelas, cinco hospitales una gran piscina y varias instituciones públicas. El 35.5% de las calles de Lwów se reconstruyeron en este período. La ciudad crecía a ritmo acelerado. La Asociación de Trabajadores de la Vivienda construyó una serie de urbanizaciones donde los pisos se podían pagar durante 20 años a razón del equivalente al sueldo medio de tres meses cada año. El préstamo debía liquidarse en 1959... Entre 1934 y 1938 se duplicó el número de árboles de la ciudad, con lo que se situó a la cabeza de Europa en cubierta vegetal urbana. Renovaron la central eléctrica, el matadero, las instalaciones de gas, la red de alcantarillado, y se edificó una nueva estación de tranvías.

«Fue entonces —escribe el artículo de aniversario publicado en el portal ucraniano de Lviv zaxid.net— cuando ocurrió el inesperado terremoto geopolítico que hizo reiniciar de raíz la historia de la ciudad y, aunque dejaría intactas las casas de Lwów, transformó a sus habitantes arrasando la atmósfera multicultural y la memoria de cientos de miles de personas».

Asamblea Nacional de Ucrania Occidental, Octubre de 1939

La guerra empezó el 1 de septiembre de 1939 y los aviones alemanes lanzaron ya las primeras bombas sobre la estación de trenes de Lwów. La ciudad, con todo, continuó viviendo como acostumbraba. Sonaba la música en los cafés y restaurantes y en los veinticinco cines se proyectaban películas americanas. La ópera programó una velada festiva hasta el día 10, víspera del sitio de la ciudad. Empezaron las clases en la Universidad y en los institutos. Mientras tanto, una gran cantidad de refugiados afluían hasta allí desde el oeste de Polonia, sobre todo judíos. Esto provocó que los  precios, especialmente los alquileres de viviendas, se dispararan y el comandante en jefe de la ciudad tuviera que congelarlos temporalmente.

Presidencia de la Asamblea Nacional

El ejército polaco, que se había estado preparando para un ataque desde el oeste, no tenía en principio ningún plan para la defensa de Lwów, situada en el confín oriental. Pero el rápido avance alemán les obligó el 7 de septiembre a montar un nuevo frente a lo largo del río San, donde también se ubica la ciudad de Lesko. Los alemanes lo atravesaron y llegaron a Lwów el día 12 después de una lucha contra una fuerza de defensa polaca muy inferior a la suya. El 17 de septiembre el ejército soviético también penetró en Polonia. El día 19 se unieron ambos ejércitos y prosiguieron juntos el sitio de la ciudad. Día 20 Hitler dio orden a su ejército de retirarse a la línea Vístula-San y rendir los territorios orientales a los soviéticos respetando los acuerdos del pacto Molotov-Ribbentrop. Con esto, el comandante en jefe de las tropas polacas que defendían la ciudad, General Franciszek Sikorski, perdió toda esperanza de defenderse y el 22, de madrugada, entregó la ciudad a los soviéticos. Los términos de la rendición indicaban que los soldados polacos podían volver libremente a sus casas o marcharse a cualquier otro país de su elección. La realidad, sin embargo, fue que la NKVD desde esa misma tarde emepezó a arrestar a los oficiales polacos y a deportarlos a la Unión Soviética, donde en abril del año siguiente serían ejecutados en Katyń junto con otros veintidós mil oficiales del ejército polaco.

Nikita Khruschev, comisario político del frente ucraniano, en Przemyśl, 29 de septiembre de 1939

«El Ejército Soviético ocupó Lwów el 22 de septiembre de 1939 —recuerda Karolina Lanckorońska, historiadora y profesora de la Universidad de Lwów, y luego miembro de la resistencia polaca, condenada a muerte por la Gestapo—. Por la mañana vimos a los primeros soldados del ejército rojo entrar en la ciudad en pequeños grupos. No parecían en absoluto unos vencedores felices u orgullosos. Iban andrajosos y confusos, como atemorizados. Recorrían la ciudad con grandes precauciones y con  obvia expresión de sorpresa. Permanecían largo rato delante de los mostradores repletos de mercancías, y tardaron un par de días en atreverse a entrar en las tiendas. Vi como un oficial compraba una tarahkhavka, una serpiente de cascabel fabricada en madera. La agitó al oído de su compañero oficial, y ambos se pusieron a saltar montando un gran jaleo. Luego la compró y se fueron muy contentos. El vendedor, sorprendido, después de un largo silencio, se recuperó de la escena y se dirigió a mí: "¿Qué llegará a ocurrir aquí, señora, si los oficiales son como estos?"»

Delegados de la Asamblea Nacional de Ucrania Occidental delante del teatro de la ciudad

Los polacos de Lwów, escribe zaxid.net, eran solidariamente hostiles a los «invasores de Moscú». Los judíos de Galizia, sin embargo, los acogieron con flores y en un ambiente de entusiasmo sincero. Esto resultó chocante a los polacos que hasta entonces habían considerado a los judíos unos buenos compatriotas y ahora veían su conducta como una traición. Pero aquellos judíos sabían en detalle lo que Hitler había hecho con los judíos de Alemania y sintieron un alvio infinito cuando la ciudad, en el último momento, fue ocupada por los soviéticos en vez de por los alemanes. La mayoría de los ucranianos de Lwów también consideraban a los soviéticos unos invasores.

Los delegados de la Asamblea Nacional de Ucrania Occidental votan por la unión con la República Socialista Soviética Ucraniana, octubre de 1939

Los habitantes de Lwów intentaron comunicarse con los soldados pero éstos no estaban autorizados a cruzar ni una palabra sin permiso de los comisarios políticos. Más adelante decidieron quién podía establecer contacto con la gente local y quién no. Los soldados que recibieron el permiso se comunicaban alegremente con los ciudadanos. Evgen Nakonechny, brillante memorialista de Lwów,  lo recuerda así: «Los soldados de Ucrania oriental, al ver los retratos del poeta nacional Sevchenko en los pueblos de Galizia, se entusiasmaban comprobando un patriotismo y una religiosidad con la que solo habían podido soñar en secreto».

Nikita Khruschev se dirige a la Asamblea Nacional de Ucrania Occidental, octubre de 1939

Al acabar septiembre el lumpenproletariat armado y portando brazaletes rojos asaltó la destilería de Bachevsk y luego empezaron a saquear las tiendas y comercios, y a vengarse por propia mano de viejas ofensas particulares. Los habitantes de Lwów organizaron un sistema de vigilancia armada, los ucranianos milicias voluntarias en las fábricas, y la policía polaca se mantuvo en servicio aún durante un tiempo. A todos ellos, las autoridades soviéticas los sustituyeron pronto por las nuevas milicias trabajadoras y campesinas.

Al acabar la Asamblea Nacional de Ucrania Occidental, un desfile de exhibición de la tecnología soviética por las calles de Lwów, septiembre de 1939

Tras el establecimiento del nuevo poder, los puestos directivos de las administraciones civil y militar, de la educación, de la cultura y de todos los otros ámbitos en Lwów y en Galizia quedaron fuera del control de los polacos. Solo se les permitía acceder a trabajos sin cualificar o emplearse como barrenderos. Aquellos puestos, anunció Molotov, debían ser ocupados «por nuestros hermanos de sangre». Había empezado la ucranización de la ciudad.

“Nuestra armada es el armada de la liberación de los trabajadores” (Stalin)


Песня об освобождении Западной Украины и Белоруссии – Canción sobre la liberación de Ucrania Occidental y Bielorrusia

Мы идём за великую Родину
Нашим классовым братьям помочь
Каждый шаг, нашей армией пройденный,
Прогоняет зловещую ночь!

Припев:
Белоруссия родная,
Украина золотая,
Наше счастье молодое
Мы стальными штыками оградим!

Над полями, лесами, озёрами
Боевые летят корабли
И свобода встаёт над просторами
Возвращённой народу земли.

Вражья сила качнётся и сломится
На штыках наших доблестных рот.
Артиллерией, танками, конницей
Мы проложим дорогу вперёд.

Припев:
Наших братьев в беде не оставим мы,
Неразрывен великий народ.
Под знамёнами Ленина - Сталина,
Под знамёнами дружбы - в поход!
Marchamos hacia la Gran Patria
a ayudar a nuestros hermanos de clase.
¡Cada paso que da nuestro ejército
ahuyenta la maligna noche!

Estribillo:
¡Nuestra hermana Bielorrusia,
Ucrania dorada,
nuestra joven felicidad:
vinimos con bayonetas de acero!

Sobre las llanuras, los bosques y los lagos
vuelan los aviones de la batalla
y la libertad se asienta
en la gran tierra de la gente libertada.

La fuerza del enemigo ha sido quebrada
por las bayonetas de nuestras valientes tropas.
Con artillería, tanques y caballería
abrimos nestra ruta.

Estribillo:
No dejamos a nuestros hermanos con problemas:
¡este gran pueblo está unido!
¡Bajo las banderas de Lenin y Stalin,
bajo la bandera de la amistad – adelante!

Gentes de Lwów saludando a los soldados del Ejército Rojo en el desfile de clausura de la Asamblea Nacional de Ucrania Occidental

En toda Galizia las escuelas se transformaron en escuelas ucranianas. En un par de meses su número pasó de 371 a 5536; y el de escuelas judías, de 23 a 103. Los letreros de la ciudad en polaco desparecieron sustituidos por ucranianos y, poco después, rusos. No obstante, la lengua cotidiana de la ciudad siguió siendo el polaco, hablado por todos independientemente de su etnia, en los mercados en las calles, en las oficinas de correos...

Los habitantes de Lwów rodean la estatua de Adam Mickiewicz, 1939

Bajo la presión de las autoridades soviéticas, la Casa de la Ópera programó el drama histórico «Bogdan Hmelnitsky» de Korniychuk, y cuando el hetman que en 1640 encendió la revuelta antipolaca de los cosacos clamaba a voz en cuello: «¡Mandaremos a los polacos al otro lado del Vístula y si es necesario, aún más allá!», un júbilo inimaginable estalló entre el público.

Los habitantes de Lwów rodean la estatua de Adam Mickiewicz, 1939

Pero, a la vez, corrían noticias de gente arrestada y deportada a Siberia; y no solo los polacos, también pasaba con los ucranianos. Un mero trabajo en la administración pública polaca era considerado por los soviéticos como un pecado mortal, con independencia de la etnia, y toda la familia del detenido era deportada con él. Los objetivos siguientes de las autoridades soviéticas incluyeron a los «burgueses nacionalistas ucranianos», los miembros del Partido Ucraniano por la Independencia (muchos de ellos mandados a Siberia directamente desde la cárcel polaca), los socialistas y los miembros de la policía y la jurisdicción polacas.

Desfile de trabajadores en el 22º aniversario de la Gran Revolución Socialista de Octubre, el 7 de noviembre de 1939. Es llamativo –aunque perfectamente comprensible– ver aquí unos rostros mucho más civilizados que en los desfiles soviéticos del mismo período

Durante la ocupación soviética, del 22 de septiembre de 1939 al 22 de junio de 1941, cerca del 20% de la población de la ciudad fue deportada, principalmente la clase media polaca y ucraniana. El ejército alemán que entró el 22 de junio también reunió a la población judía en un gueto y a lo largo de 1942 los fueron transportando hasta aniquilarlos a todos en el campo de Belzec. Su recuerdo se mantiene vivo en el film Lwów, realizado en 1938-39 por Saul y Yitzhak Goskind sobre la comunidad judía local. Entre 1941 y 1944 el ejército nacional ucraniano, al mando de Stepan Bandera comenzó a asesinar sistemáticamente a la población polaca en todo el antiguo territorio polaco: el número de víctimas está muy por encima de las doscientas mil. Y después de la Guerra, al volver el ejército soviético realojó al resto de la población polaca de la ciudad en la nueva Polonia, en el lugar dejado por la comunidad alemana —cerca de dos millones— que fue forzada a restablecerse en Alemania. En 1947 Lwów había perdido cerca del 80% de la población que tenía antes de la Guerra.

Representantes de la nación trabajadora! Votad por la unión de Ucrania Occidental con la Ucrania soviética, la unida, libre e independiente República Socialista Soviética Ucraniana!

Este julio se montó en Lviv una exposición sobre el periodo de ocupación de 1931 a 1941, organizada por los Institutos Conjuntos Polaco y Ucraniano para la Memoria Nacional. También se presentó aquí el film de propaganda —por otra parte bastante profesional— realizado por Aleksandr Dovzhenko en 1939 con el título La liberación de los pueblos de Ucrania y Bielorrusia del yugo de los terratenientes polacos y la unión de los pueblos amigos. Puede verse el film a continuación, en ocho partes.
















28 septiembre, 2010

Pollença

Clic para imagen completa

Inici de tardor

El pont romà

Santo Domingo

19 septiembre, 2010

Filantropía

La edición del 2 de mayo de 1945 del News Chronicle está considerada una de las
«15 portadas de periódico más inolvidables jamás impresas».

Un tópico mil veces repetido de cierta ciencia-ficción —o historia-ficción— de baja estofa  es el de la supervivencia del Führer al final de la guerra y su existencia posterior desapercibida: como honrado burgés en Argentina o Brasil, como prisionero del KGB en las cárceles soviéticas o, incluso, como urdidor de un regreso triunfal desde alguna base militar escondida. Sin embargo, el siguiente documento fotográfico debería liquidar todas estas estúpidas fabulaciones. Adolf Hitler murió, sin la menor duda, y está bien enterrado. Concretamente bajo una losa vertical en el cementerio judío de Bucarest desde el 26 de octubre de 1892.


Aici se odichneşte remăşiţele mortuare ale reposatului
ADOLF HITTLER
încetat din viaţă la 26 octombrie 1892, în etate de 60 de ani.
Rugaţi-vă pentru dânsul

Aquí yacen los restos mortales de
ADOLF HITTLER
fallecido el 26 de octubre de 1892, a la edad de 60 años.
Rogad por él

La sorprendente noticia fue aireada hace unas semanas por el portal 20minutos.es, y de momento solo se ha difundido por las webs españolas. Desde esta información, con todo, no fue difícil dar con la fuente. Era una entrada del 29 de julio del excelente blog en español publicado en Bucarest Un vallekano en Rumania, que se hacía eco del artículo del pasado 12 de octubre publicado en rumano en el portal frontpress.ro.

A su vez, el portal rumano remitía al libro Filantropia, un cimitir plin de viaţă (Filantropía, un cementerio lleno de vida) del hebraísta rumano Marius Mircu (1909-2008), sobre Filantropía, cementerio askenazí que es el mayor cementerio judío de Bucarest.   (Los judíos sefardíes tienen su propio cementerio, el Giurgiului, y hasta el Holocausto hubo allí también un tercer cementerio instaurado en el siglo XVII en la carretera de Sebastopol. Se le puede echar un rápido vistazo en la web Metropotam dedicada a la historia de Bucarest). Según esta referencia, un empleado del cementerio judío dio con esta lápida por casualidad al limpiar la maleza que la cubría, en 1940, durante el régimen fascista de Antonescu, y temeroso de las posibles consecuencias, machacó la inscripción rumana dejando solo la hebrea. Hubo que esperar a 1987 para que el rabino de Bucarest Moses Rozen ordenara que la leyenda fuera restaurada.

El portal rumano sostiene que en Bucarest no había ninguna familia de nombre Hittler, y que Adolf Hittler tuvo que haber emigrado desde la antigua provincia austriaca de Bucovina. Además, suponen que la palabra no era el apellido del difunto sino más bien su profesión. Es decir, una versión corrupta del alemán «Hüttler», sombrerero. Esta presunción, no obstante, es poco verosímil por una serie de razones. ¿Por qué iba alguien a escribir en alemán la profesión del fallecido en un texto rumano, usando un término arcaico en lugar del moderno «Hutmacher» y, encima, en una forma corrupta, como apellido, por puro error?

Pero la entrada de 20minutos.es va más lejos y cuenta que Marius Mircu descubrió en los archivos de Bucarest que Adolf Hittler había sido un sombrerero que hasta tenía un taller y una sastrería en Bucarest. Si Mircu realmente afirmó tal cosa, lo imposible es comprobar cuándo. De hecho, su libro es de una rareza tal que, aparte de los artículos sobre esta tumba, solo encontramos otras dos ocurrencias en toda la Red. Se publicó en 2001 en Bacău, en la editorial Egal, y tan solo hemos podido localizar tres bibliotecas que lo posean: la Biblioteca del Congreso (con una errata en el lugar de publicación), la British Library y la Biblioteca Nacional de Jerusalén. Két Sheng intentará obtenerlo por intercambio interbibliotecario, pero hasta que lo consiga permaneceremos a oscuras sobre la fuente de informacón acerca de las actividades como sombrerero de Hittler.

Solo entre paréntesis, esto nos recuerda que en las librerías de Transilvania, a la vista de la multitud de títulos locales o privados siempre nos preguntamos cuántos de estos libros llegarán a las bibliotecas públicas, dónde podrán acceder a toda esta variopinta y excitante información los extranjeros como nosotros si no es visitando regularmente esas tiendas que almacenan un tesoro de cultura local. Seguramente en ningún sitio, como ocurre con el estudio de Mircu.

Pero busca y encontrarás, aunque a veces no exactamente lo que buscabas. Un mes más tarde de la publicación de frontpress.ro la noticia fue más o menos repetida en inpolitics.ro. Pero ellos añadían una imagen sin más comentarios. Obviamente había sido tomada de un viejo periódico que también publicaba el siguiente texto junto con la foto:


Mormântul lui Adolf Hittler din Bucureşti

Evreii americani comentând atitudinea dictatorului german faţă de cetătenii de rassă semită, au emis părerea că Hitler trebue să fie evreu, deoarece in decursul istoriei cei mai mari asupritori ai israeliţilor au fost renegati. Astfel o pildă printre cele mai ilustre o alcătueşte marele inchizitor Torrequemada, care era evreu botezat.
In consecinţă americanii au făcut apel la comunităţile evreeşti din toată lumea să cerceteze dac’a existat o familie austriacă, Hitler, înrudită cu cancelarul german.
Un evreu bătrân din Alexandria (Egipt) şi-a amintit c’ar fi cunoscut în România cu patru cinci decenii in urmă pe un oarecare Hitler. S’a adresat rabinului dr. Niemerower din Bucureşti, care de fapt a găsit în cimitirul Filantropia un mormânt datat 26 Octombrie 1892 şi a cărui piatră funerară o reproducem în ilustraţia noastră. (*) Mormântul e ai lui Adolf Hittler, supus austriac. El a venit în România din părţile Poloniei de azi şi s’a angajat cu portar la hotelul Boulevard.
E probabil că nu există nici o legătură intre decedatul Adolf Hittler şi cancelarul german. Oricum insă, se dovedeşte că numele Hitler poate fi şi un nome evreesc şi că ipoteza ca în vinele cancelarului german să existe sânge semit, nu este exclusă. Dealtminteri aceasta n’ar avea absolut nici o importanţă.

*) Mormântul poartă no. 9 şi se găseşte în rândul al 18-lea. Se găseşte în locul unde sunt îngropaţi săracii.
Tumba de Adolf Hittler en Bucarest

Judíos americanos, comentando la actitud hacia la raza semita del dictador alemán, han lanzado la opinión de que Hitler debe ser judío, porque en el curso de la historia los mayores opresores de los israelitas han sido siempre renegados. Uno de los ejemplos más ilustres es el Gran Inquisidor Torquemada que fue un judío bautizado.
Los americanos han pedido a las comunidades judías internacionales que investiguen si existe alguna familia austríaca [judía] de nombre Hitler relacionada con el Canciller alemán.
Un anciano judío de Alejandría (Egipto) recordó que cuatro o cinco décadas atrás conoció a un tal Hitler en Rumanía. El dato dirigió las pesquisas hacia el Dr. Niemerower, rabino de Bucarest que, en efecto, encontró en el cementerio Filantropía una tumba de 26 de octubre de 1892 cuya lápida reproducimos en la ilustración (*) La tumba es del individuo austríaco Adolf Hittler, que vino de Polonia a Rumanía y trabajó como portero del Hotel Boulevard.
Puede que no haya conexión entre el difunto Adolf Hittler y el Canciller alemán. Pero,  como parece que Hitler puede ser un nombre judío, no se excluye que corra algo de sangre judía por las venas del Canciller germano. Con todo, esto carece por completo de importancia.

*) La tumba lleva el número 9 y se encuentra en la parcela 18. Está en la zona donde se entierra a los pobres.

¿Cuál era la fecha de este artículo? La mención de Hitler como Canciller alemán y las no más de cuatro o cinco décadas pasadas desde la muerte de Hittler apuntan a los años 30 o 40. La referencia a Niemirower estrecha aún más los límites de la datación. El gran reformador, rabino principal, miembro del senado rumano y líder espiritual de todos los judíos de la Rumanía pre-bélica murió el 18 de noviembre de 1939. Por tanto, el artículo tuvo que publicarse en algún momento de la segunda mitad de los años 30, en el ambiente relativamente antigermánico que se respiraba bajo el rey Carlos, antes de la crisis interna producida por la anexión soviética de Besarabia y Bucovina del norte, y de la restitución del norte de Transilvania a Hungría en 1940, factores que abrieron el camino al poder al pro-germano Antonescu. Bajo el nuevo régimen, que organizó pogroms que provocaron la muerte de casi cuatrocientos mil judíos en Rumanía y en los territorios soviéticos invadidos por el ejército rumano (incluida Odesa), habría sido imposible escribir sobre el Führer en un tono tan frívolo. Y es muy probable, contrariamente al relato de Mircu, que la lápida no fuera hallada por casualidad por un empleado del cementerio, sino que los judíos de Bucarest intentaran deliberadamente eliminar la provocativa inscripción de la tumba que años antes había recibido cierta atención y publicidad en artículos similares al que hemos reproducido.

Una mirada más de cerca a la antigua imagen de la tumba prueba lo concienzudo de su trabajo.


Esta lápida se parece a la que vemos en las fotos modernas solo en sus rasgos principales. Parece que no solo las letras rumanas sino toda inscripción y decoración fue machacada y luego se cinceló de nuevo en 1987. El contenido del texto rumano no se cambió, pero sí la tipografía, así como el  símbolo de la parte superior, que fue transformado en un bajorrelieve mucho menor y coronado por una estrella de ocho puntas. El texto original hebreo de tipografía clásica fue también cincelado nuevamente con una calidad inferior, aunque su contenido se mantuvo idéntico:

איש יקר הר
אברהם אליהו
במוה' שמואל
נפ' ביום כ' חשון התרנג
ת'נ'צ'ב'ה

El preciado hombre, rabino
Avraham Eliyahu,
hijo de nuestro maestro, el rabino Shmuel.
Falleció el 20 de Heshwan 5653.
Que su alma se una al haz de la vida.

20 de Heshwan 5653 corresponde a 10 de noviembre de 1892. En efecto, Rumanía solo cambió al calendario gregoriano en 1919, y en el calendario juliano la fecha hebrea puede ser 26 de octubre. Pero según la inscripción el difunto era un rabino e hijo de rabino. ¿Vio Marius Mircu esto? Y si así fue ¿cómo casa el dato con una presunta profesión de sombrerero? ¿Y con el trabajo de portero en el Hotel Boulevard? Cuanto más avanzamos en nuestra investigación, más confusa se torna. La vida de Adolf Hittler quizá fue apasionante, lo ignoramos, pero no cabe duda de que ha tenido una muerte llena de avatares.

04 septiembre, 2010

Quod erat demonstrandum

Bernardino Genga - Charles Errand, Anatomia, Roma 1691, grabado del pre-frontispicio

Desde los inicios del siglo XVI la anatomía fue uno de los instrumentos —al lado de los mapas con retícula, la perspectiva central, el derecho romano...— que contribuyeron a homogeneizar el mundo.

Esqueleto humano comparado al de las aves. Pierre Belon, Nature des oyseaux (Naturaleza de las aves),
París 1555

Un motor importante de la investigación anatómica fue la convicción renacentista de que las cosas se podían explicar remitiendo a sus principios básicos —en este caso, a su esquema funcional y de sostén. Si los principios fundamentales de dos cosas son idénticos, esas dos cosas se vuelven inmediatamente comparables. Sin este punto de partida, la taxonomía de Linneo y la teoría de la evolución de Darwin no habrían visto la luz dos o trescientos años más tarde, como tampoco pudieron desarrollarse, de hecho, en China o en la Europa medieval, donde estas relaciones no se contemplaban.

Contrapartida de la imagen previa: Esqueleto de ave ajustado a la anatomía humana con propósitos comparativos. Pierre Belon, Nature des oyseaux (Naturaleza de las aves), París 1555

En las historias naturales de los siglos XVI y XVII encontró ancha vía de expresión este tipo de razonamiento así como la reducción anatómica al mínimo común denominador —procedimiento que se llevaba a cabo tanto tanto sobre la zoología antigua conocida como sobre la nueva—. Cada descubrimiento de un animal o de un ser prodigioso se hacía inteligible insertándolo de entrada en el sistema consabido, describiendo su anatomía y, ante todo, dibujándolo.

Comparación de tipos de cuerno exóticos, y el dibujo anatómico explicativo del animal legendario conocido como «conejo cornudo». Conrad Gesner, Tierbuch, Frankfurt 1563


Dibujo anatómico de siameses. Fortunio Liceti, De monstris, Amsterdam 1665

La edad heroica de la taxonomía biológica ya queda lejos, pero la anatomía como principio explicativo aún es bien capaz de insertar con una especial fuerza de convicción a cualquier criatura del mundo legendario en el nuestro actual.


Esqueleto y sistema muscular de una sirena. Según la inscripción original, el «texto hebreo
indica que este  dibujo bien puede basarse tanto en otro texto latino o árabe, o bien se
trata de una invención moderna que pretende aparentar antigüedad u oscuridad»

Valentin Gubarev (b. 1948): Sirena común de agua corriente


Edvard Eriksen (1876-1959): Sirenita (1909-13), Copenhague, y el «esqueleto de una sirena extinguida» puesta en su lugar durante su traslado a la Expo de Shanghai

Anatomía de un centauro. Doble caja pulmonar y, presumiblemente, un doble estómago dan
razón de la fuerza y perseverancia imbatible de los centauros. Álvaro Cunqueiro
se preguntaba dónde tendrían el ombligo.


Dragones, por lo que sabemos, hay de dos tipos. Este es el esqueleto y musculatura de un dragón occidental, extendido por Europa y el Oriente Medio (Eugene Arenhaus and Jennifer Walker).


Y este es el esqueleto del alargado, serpentino dragón oriental nativo de China (Jennifer Walker).



Anatomía de un grifo (1, 2, 3)

A Japón llegó la fascinación por los dibujos anatómicos solo al empezar el siglo XIX —algo escribiremos más adelante sobre esto—, pero allí se usó para demostrar la estructura y funcionamiento de seres legendarios bastante antes que en Europa o América. La existencia de los monstruos de los cómics kaiju se autentificaba por medio de una serie de publicaciones anatómicas que se remontan a principios de los 60.

Este esquema anatómico de Godzilla revela un cerebro relativamente pequeño, pulmones
enormes que le permiten aguantar bajo el agua, músculos en las patas que soportan
20.000 toneladas de masa corporal, una «bolsa de uranio» y una «bolsa
de reacción nuclear» para producir aliento de fuego radiactivo
y dotar de energía al cuerpo

Gamera. El dibujo también muestra una serie de órganos en forma de bolsa para almacenar lava,
aceite, carbón y uranio (igual que Godzilla), así como órganos en forma de globo en
las patas que le permiten lanzar aire a chorro por las plantas de los pies

Este dibujo anatómico de Anguirus muestra unos ojos capaces de detectar luz infrarroja, un par
de sub-cerebros que controlan las patas delanteras y traseras, músculos traseros
altamente desarrollados, un caparazón armado y una pesada cola

Recientemente el maestro Manga Shigeru Mizuki ha sacado una guía titulada Yokai Daizukai con dibujos de los demonios yokai, tradicionales del folklore japonés. En ellos, de manera semejante a las anatomías de los artistas occidentales, muestra los diagramas anatómicos de ochenta y cinco de tales demonios, evidenciando así las características especiales que los definen a cada uno. El Tentáculo rosa ha publicado una descripción en inglés de diez de ellos.

Makura-gaeshi («mueve-almohadas») es un bromista roba almas al que se le conoce por cambiar
las almohadas de sitio mientras la gente duerme. Es una criatura invisible a los adultos, solo los
niños le ven. Sus características anatómicas incluyen un órgano para guardar las almas de
los niños que ha robado, otro para convertir las almas en energía para el resto de su
cuerpo y una petaca con arena mágica que adormece a la gente cuando se la
echa en los ojos. Además, tiene dos cerebros, uno para rumiar travesuras

y otro con el que crea luces con los colores del arcoiris
que luego emite por los ojos

Bisha-ga-tsuku es otra criatura roba almas que se encuentra las noches de nieve en el norte de
Japón. El monstruo —que mantiene una temperatura corporal de -150 grados Celsius— está
siempre oculto tras una espesa nube de condensación, pero su presencia se detecta por
una característica humedad y un ruido como de chapoteo («bisha-bisha»). Entre
sus rasgos anatómicos se incluyen unas antenas que absorben almas humanas

y aire frío, un saco para almacenar los sonidos de los corazones humanos
cuando laten, y un cerebro que emite un aura espantosa. El Bisha-
ga-tsuku se reproduce mezclando las almas humanas
con el aire frío que inhala

Kuro-kamikiri («cortador de pelo negro») es una criatura enorme de pelo negro que se acerca
a las mujeres en la calle, de noche, y subrepticiamente les corta el pelo. Su anatomía
presenta un cerebro diseñado para el sigilo y el engaño, zarpas afiladas como
navajas, una larga lengua retráctil cubierta de pequeñas espinas que
enganchan el pelo y un saco con polvos para dormir que usa
para aturdir a sus víctimas. Su sistema digestivo incluye
un órgano que segrega un fluido que disuelve los
pelos, así como otro con una especie de
dedos que empujan los intestinos
para facilitar la digestión

Mannen-dake («bambú de 10.000 años») es un monstruo en forma de bambú que se alimenta
de las almas de los viajeros perdidos que acampan en los bosques. Su anatomía incluye
una serie de tubos que producen aire para hacer que los viajeros se extravíen,
dedos como jeringas que inserta en el cuerpo de las víctimas

para absorberles el alma y un saco para
almacenar las almas robadas

Kijimunaa es un duende juguetón del bosque que habita en lo alto de las higueras de Okinawa.
Tiene las cuencas de los ojos equipadas con rodamientos a bolas que le permiten girar
los ojos a placer, fuertes dientes para devorar cangrejos y arrancar los ojos de
los peces (su plato favorito), un abrigo de pelo hecho de fibras vegetales
y un sistema nervioso adaptado para ejecutar trastadas. El cerebro del
Kijimunaa contiene vívidos recuerdos de haber sido capturado
por un pulpo, la única cosa a la que teme y odia

El Fukuro-sage —una especie de tanuki (perro mapache) localizado en las prefecturas de Nagano
y Shikoku— tiene la habilidad de adoptar la forma de una botella de sake, con la que se le
suele ver rodando por las calles empinadas. La botella representa un serio peligro para
la gente que intente seguirla cuesta abajo, pues uno puede acabar despeñado en un
barranco o una zanja. Sus características anatómicas son un estómago que
transforma la comida en sake, y una bolsa para guardar veneno que
mezcla en las bebidas. La orina del Fukuro-sage tiene un potente
olor que desorienta a los humanos y deja inconscientes
a los insectos y otros animales pequeños

Hyōsube, monstruo de río del tamaño de un niño que vive en cavernas bajo el agua, se aventura
de noche en tierra para comer plantas de arroz. Tiene un cerebro relativamente pequeño, un
sistema nervioso especializado en detectar humanos, una piel gruesa y gomosa, garras
afiladas, dos estómagos pequeños (uno para granos de arroz y otro para pescado),
una gran bolsa para guardar el pescado sobrante y otras dos grandes bolsas
de oxígeno para casos de emergencia. Un par de huesos giratorios
como bobinas producen una bacteria infecciosa que
el monstruo espolvorea sobre los
humanos desprevenidos

Yanagi-baba («bruja sauce») es el espíritu de un sauce de 1.000 años. Sus características
anatómicas incluyen una cabellera larga y verde parecida a las hojas del sauce, piel
como corteza rugosa, un estómago que absorbe el alimento directamente
de las raíces, y una bolsa para almacenar savia. Aunque Yanagi-baba

es relativamente inofensiva, se la conoce por molestar a los
transeúntes enganchando sus paraguas con el pelo,
expulsar niebla por las narices y escupir savia

De Doro-ta-bō («hombre del arrozal embarrado»), monstruo que se encuentra en los arrozales con
lodo, se dice que es el espíritu infatigable de un laborioso granjero cuyo perezoso hijo vendió las
tierras a su muerte. A menudo se oye al monstruo exclamar «¡Devuélveme mi arrozal!» Sus
características anatómicas incluyen una parte inferior del cuerpo gelatinosa que sumerge
bajo tierra, una bolsa de barro que extrae alimento del suelo, pulmones que permiten
a la criatura respirar enterrada y un órgano que convierte su resentimiento en
energía con la que calienta sus esputos de barro. Un ojo permanece oculto
bajo la piel hasta que el monstruo encuentra al propietario del arrozal,
en este momento el ojo emerge de pronto y emite una luz

extraña y desorientadora.

Kasha, mensajero del infierno, es un monstruo fiero conocido por provocar tifones en los
funerales. Sus características anatómicas incluyen pulmones poderosos para generar
el fuerte viento de los tifones, capaz de levantar ataúdes y llevarse a los difuntos,
una nariz para olfatear funerales, una lengua que detecta la dirección del
viento y un bolsillo con hielo del infierno. Para provocar la lluvia,
los Kasha escupen pedazos de este hielo a través
de su cortina de fuego eterno

Finalmente, una consecuencia reciente de aquel venerable método renacentista la hemos localizado en el trabajo de Jason Freeny, quien se dedica a descubrir las relaciones internas esenciales no solo entre los humanos y otros seres vivos, sino también entre nosotros y toda una variedad de objetos inanimados, en un loable empeño de llegar a la última frontera de la anatomía comparada.